domingo, 22 de octubre de 2017

Cuento: "Ambrosio y Pepe"

Hace muchos años vivía en Galicia un campesino llamado Pepe, era un hombre muy humilde y vivía con su esposa y sus hijos en una casita al lado de un gran castillo. En él vivía Ambrosio, el cual contrató a Pepe y a otros campesinos para que trabajaran sus tierras. Los campesinos aceptaron el trabajo, ya que ganaban una pequeña parte de la cosecha.

Estuvieron trabajando días, meses, años, hasta que un día Pepe le dijo a Ambrosio que se iba a marchar. Le daba muy poca parte de la cosecha y trabajaba demasiado. Ambrosio le dijo que no lo iba a dejar que se marchase ni a él ni a ningún otro campesino, en ese momento, Pepe se dio cuenta de que era un esclavo de Ambrosio y no le iba a dejar irse.

Un día Pepe se enteró gracias a un mercader, que en Córdoba se vivía muy bien y se le ocurrió una idea: juntarse todos los esclavos de Ambrosio e irse a vivir a Córdoba. Aunque estuviera muy lejos y así vivir mejor. Le propulsó la  idea a los otros campesinos y a ellos les pareció bien, solamente había un problema, que Ambrosio no les iba a dejar irse tan fácilmente.

Al siguiente día, Ambrosio se encontró con que no había ningún campesino, se enfadó mucho y les ordenó a sus caballeros que fueran a buscarlos, los encontraron pero Pepe les explicó que Ambrosio les trataba muy mal, no les daba casi nada de la cosecha y no podían mantener a sus familias. Los caballeros los entendieron y se dieron cuenta de que Ambrosio también les trataba como unos esclavos, así que se unieron a ellos.

Los campesinos y los caballeros emprendieron su viaje a Córdoba y estuvieron cuatro meses de viaje, cuando llegaron allí, sembraron cosechas y las vendieron. Los caballeros se fueron a un castillo y le propusieron al rey que le protegerían a cambio de dinero. El rey aceptó la propuesta y así ganaron mucho dinero, pudieron mantener a sus familias y construirse sus casas.

Ambrosio, se quedó solo sin sus caballeros y sus campesinos y al final, acabó siendo él también un campesino, esclavo de un señor.

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